dijous, 13 de març del 2008

Arte "Kitsch"


Objetos de arte "Kitsch"

Este nuevo movimiento contracultural está estrechamente relacionado con la cultura “trash”. El arte “kitsch” surge de la misma mezcla entre lo sofisticado del detalle y lo grotesco, lo cotidiano con lo desagradable. Lo que caracteriza este tipo de arte es su bajo precio, en principio todas las figuritas que venden en los

“chinos” formarían parte del arte “kitsch”. Objetos sin utilidad, sin armonía estética, grotescos, ridículos, sobrecargados.


Este nuevo movimiento artístico llega también al cine, podemos encontrar un ejemplo claro en muchas escenas de películas de Pedro Almodóvar. La búsqueda de producir desagrado, de forma brusca e incluso burda, sucia; pero sin dejar de relatar una situación real, más o menos verídica. Supongo que, en cierta manera, el “kitsch” logra traspasar la pantalla para transmitir los sentimientos más desagradables por medio de escenas antiestéticas.

Henry Darger, en sus acuarelas, también expresa esta forma de arte “kitsch”, que se enmarca dentro de la cultura “trash”.

Reflexión sobre arte “kitsch”

¿Hasta qué punto puede considerarse arte? ¿Ha de condenarse por vulgar? La vulgaridad es un fenómeno social real, al igual que la perversión. Si arte es sólo aquello que produce una sensación agradable, podría condenarse. Pero, ¿qué es el arte? ¿No es una forma de expresión? ¿Acaso tenemos legitimidad para condenar nada, únicamente por una cuestión tan subjetiva como es el gusto? ¿En una sociedad democrática como la de hoy?

Considero que se ha de medir el arte en base a un parámetro diferente: el grado en que el autor consigue implicar al espectador. Si el objetivo es producir desagrado, e incluso vulgaridad, quien mejor sepa transmitirlo también puede producir arte.

No se puede condenar una producción sólo por el gusto, te parezca más o menos artística, porque la opinión está completamente sujeta a los fenómenos sociales actuales, y al estrato de la sociedad al que se pertenece.

Oscar Wilde fue juzgado porque sus obras eran consideradas inmorales… ¿El retrato de Dorian Gray es inmoral? Para Wilde, una obra no podía ser ni moral ni inmoral, era sólo arte. Para los que le juzgaban, incitaba a un comportamiento incorrecto. ¿Qué haríamos hoy sin Wilde? A saber cuántos grandes autores nos hemos perdido sólo por convicciones sociales y tradiciones de cada época, que han censurado sus obras o, incluso, destruido. Soy totalmente contraria a la censura, y aunque la estética del “trash” y los objetos del “Kitsch” no me atraen en gran medida, he de admitir que hay quien sabe conseguirlo muy bien, y que no es para nada condenable que alguien se sienta atraído por esa vulgaridad más o menos sofisticada.

Cultura "Trash"

¿Qué se entiende por cultura “Trash”? No hay mucha información sobre este nuevo movimiento contracultural, que se gesta en las raíces del arte urbano contemporáneo. La cultura “trash” adopta nuevas estéticas, reinterpretando códigos sociales y de vestuario, y tomando como referentes diferentes movimientos musicales de distintas épocas históricas. El compendio de modernidad y antigüedad, la búsqueda de la distinción y la sofisticación a al vez que el desaliño ha dado como resultado lo que algunos llaman “la moda basura”.

Lejos de querer hacer juicios de valor, lo que actualmente se entiende como cultura “trash” oscila entre la elegancia y la sofisticación, y el desaliño y la suciedad. Es un estilo espectacularizador y exhibicionista, que busca atraer miradas. Une elementos de diversas tribus urbanas contemporáneas, como el hip-hop, el rap que se mezclan con fenómenos sociales como los videojuegos y la televisión. Se inspira también en la psicodélica de los 70 y en el mundo multicolor de los 80, así como en figuras de esta década como Warlhol o Keith Harring.

Henry Darger

Las vírgenes suicidas. HENRY DARGER

In the Realms of the Unreal

Poco se sabe sobre él, y no me atrevo a asegurar nada, pues las informaciones difieren dependiendo de la fuente. No obstante, parece que Henry Darger nació en Chicago, en 1892. A los 4 años tuvo una hermanita, su madre murió en el parto y su padre (que en algunos sitios se menciona que era discapacitado) tuvo que dar a su hermana en adopción. Parece que el hecho de la hermana que no conoció marcaría de una manera particular su obra.

Artista póstumo, murió en un hospicio de las Hermanitas de la Caridad, en Abril de 1973. Nathan y Kyoto Lerner, los propietarios de la casa en la que Darger pasó la mayor parte de su vida, descubrieron su gran obra tras su muerte. Henry Darger escribió La historia de las Vivians, una novela compuesta por más de 15.000 páginas, acompañada con ilustraciones impresionantes, de hasta cuatro metros de largo.

La historia In the Realms of the Unreal, narra las aventuras de siete hermanas pequeñas, de entre 5 y 8 años, princesas de una región de un planeta alrededor del cual orbita la Tierra. Las niñas se enfrentan a unos soldados malvados que las esclavizan y torturan, igual que al resto de los niños del planeta. Ellas luchan continuamente para salvar a la infancia.


Su obra, un reflejo de su vida


Su obra refleja una mente complicada, algunos insinúan que incluso perturbada. La obsesión por las niñas pequeñas, a las que pintaba desnudas y con penes; y las escenas de violencia que sufren a manos de los soldados, pintadas y narradas al detalle, le han proporcionado la fama de pedófilo en más de una ocasión. Además de una extraña obsesión por una niña que fue secuestrada y asesinada en Chicago, a la que le construyó un altar cuando perdió una foto de un recorte del periódico, y que hizo que alguno se atreviese a sugerir que quizás él fue el asesino.

Aunque lo poco que se sabe de su vida apunta a una personalidad solitaria y marginada, concurrente asiduo a misa; su obra es, en mi opinión, la forma de expresión de esa mente complicada. Desde niño, en el colegio en el que fue internado, sus compañeros le apodaron “el loco”, después fue internado también en un colegio psiquiátrico con diagnóstico: “masturbación”. La verdad es que su vida está poco clara, aparece borrosa ante nuestros ojos. Tras su estancia en el hospital, habiendo muerto ya su padre, decidió volver a Chicago, donde alquiló un apartamento a Nathan Lerner y compiló su gran obra. Obra que, al conocerse tras su muerte, lo convertiría en un artista referente del arte marginal o de la cultura “trash”.

Su obra es espectacular. Parece que quiere transmitir el momento en que la infancia pierde la inocencia a manos de la experiencia, de la crueldad. Y, a pesar de lo perturbado de las escenas (la transexualidad de las niñas heroínas, la crueldad de las escenas de tortura que sufre la infancia a manos de los soldados), la mezcla y los diferentes tonos de los colores, unidos a la espectacularidad de las acuarelas y a escenarios que van desde jardines edénicos hasta sangrientos campos de batalla, convierten las pinturas y las más de 15.000 páginas en una obra de arte impresionante, que ahora se expone por todo el mundo y ha inspirado una película documental dirigida por Jessica Yu, In the Realms of the Unreal. Life and Art of Henry Darger, inspirado en la excéntrica personalidad y vida del póstumo artista, que supo transmitir en su obra toda la intensidad de la inocencia perturbada.



dimarts, 4 de març del 2008

“Freaks”… ¿el Nuevo Arte Urbano?

Antes, quizás, los marginados, incluso los común y maliciosamente llamandos “hazmerreír” del público… hoy tienen nombre y, gracias a Internet, ya no se sienten solos en el mundo… los “freaks” se han unido a través de la red en asociaciones de participantes en diversos juegos, o chats multimedia donde hablan con sus compatriotas universales de sus “freakadas”… ¿Es arte? No todo lo que producen todos los que quieren considerarse “freaks” (antes, quizás, un insulto; hoy una definición, un estilo de vida, como un “punky”, o un “heavy” o un “hippie” o un… ¿”yupi”? Aporto ideas por si algún nuevo movimiento se queda sin nombre…) puede considerarse arte, ni todos los “freaks” artistas. Pero como en todas partes, supongo… no todo aquel que pinta es un pintor con arte, ni todo aquel que escribe un gran narrador… así hasta el infinito.

Pero lo que es innegable es que los “freaks” se han hecho un hueco en la sociedad, y no es que pasen desapercibidos. Cada vez más se utilizan los vídeos de you tube, donde una persona aparece haciendo lo que cualquiera podría considerar una estupidez, en los programas de zapping o humor. El resultado: risas, a veces con ganas, otras sólo por el patetismo de la escena. El tema es que los “freaks” aparecen en televisión, subiéndose a la palestra pública, y arrancando diversas carcajadas entre los espectadores. ¿Es arte? ¿Quién tiene legitimidad para decidir qué es arte y qué no lo es? Parece que hoy la opinión pública es el juzgado que decide qué es digno de ser observado y qué no lo es. Si fuese así y todo lo que mira la opinión pública fuese arte, esta palabra habría perdido todo su valor.

Pero, ¿y la cultura? Mi ignorancia me impide precisar si alguna de las “freakadas” de los “freaks” puede considerarse arte. No obstante, sí creo poder asegurar con cierto grado de fiabilidad que los “freaks” forman parte de la cultura urbana actual. Representan a un sector de la opinión pública que trata de expresarse mediante una clara diferenciación en sus hábitos de ocio o, incluso, en el vestir. Quizás. El caso es que son parte del movimiento social de hoy en día; sociedad que a pesar de no estar totalmente democratizada tiene el orgullo de poder considerarse heterogénea, variada, diversa; movimiento que conforma las estructuras culturales que rigen nuestra actualidad. Los “freaks” son parte de la sociedad y, como tal, son productores de cultura.

Sinceramente, ante la poca claridad de mis ideas, sólo puedo acabar con una pregunta: ¿qué es, en realidad, un “freak”?

¿Genios perdidos en la mediocridad del grupo?

“Todo parece indicar que ahora vacilan quienes desestimaron el genio como un fetiche del siglo XVIII. El pensamiento grupal es la plaga de nuestra Era de la Información y su efecto es más pernicioso en nuestras obsoletas instituciones académicas, cuyo largo suicidio empezó en 1967. El estudio de la mediocridad, cualquiera que sea su origen, genera mediocridad “

-Harold Bloom-

(Genius: A Mosaic of One Hundred Exemplary Creative Minds.

New York: 2003. ISBN 0-446-52717-3)

“Yo no tengo ideología. Prefiero a Oscar Wilde que a Lévi-Strauss o Foucault”

-Harold Bloom-

Harold Bloom, crítico de los críticos. Perteneciente a un culturalismo particular y original, alejado de las teorías deconstructivistas guiadas por Paul de Man y adoptadas por los profesores de la Universidad de Yale, en la que había estudiado y trabajaba. Creía en la literatura como un elemento útil en la vida, necesario para conocernos y conocer a los demás. Sentía la necesidad de expresarle al mundo que el genio es algo más que el talento. Que los genios son más que los autores alabados por los estudios culturales o multiculturales norteamericanos. Con El Canon Occidental, publicado en 1994, pretendía acercar al lector grandes autores, marginados por los estudios culturales anglosajones, a la vez que criticaba a los críticos, tanto de izquierdas como de derechas, por politizar los estudios y la crítica literaria.

Lo que intento hacer es defender el canon tradicional de la literatura occidental. Me interesa seguir demostrando por qué Shakespeare, Cervantes, Dante, Milton, Dickens y otros muchos son los autores que la gente debe leer, pero en las universidades del mundo anglosajón la batalla está perdida, así que en mis libros y en mis clases lo que dirijo es una especie de guerra de guerrillas, como los talibanes, pero con la certeza de que la campaña aquí ya terminó. Pero no es así en otras partes del mundo”

-Harold Bloom-

(Entrevista realizada al crítico en 2002, por Fernando Castelo, poco antes

de que se le hiciera entrega del Premio Internacional de Catalunya)

Defiende, tanto en sus estudios, ensayos y críticas, como en las clases que impartía en la Universidad de Yale, la eminencia estética y la utilidad de la literatura para la vida. Harold Bloom, a diferencia de los estudios culturales, trata de mostrar cómo un autor representa la realidad en su obra, en todos sus aspectos. Dice no pretender despertar conciencias, lo que recuerda a Wilde y su convicción de que una obra no puede ser inmoral. Tampoco le interesa la perspectiva historicista porque, para Bloom, un genio no es sólo producto de su contexto; en su amplio ensayo Genios compara a Shakespeare con algunos de sus contemporáneos, como Thomas Middleton, Philip Massinger y George Chapman, y asegura que no todas las obras que se producen en un mismo contexto llegan a trascender como Shakespeare ha logrado, y logrará, hacerlo.

Matizando que los 100 autores que estudia en su obra Genios no son los únicos “genios”, trata de extraer una idea personal, original y abstracta sobre lo que la designación del término significa. ¿Qué es el “genio”? Lo que diferencia una obra de una obra excepcional, de una obra que trasciende. Lo que distingue a un autor que posee ese genio creador es que es capaz de penetrar en la vida de los lectores, sus personajes se hacen más reales que la realidad misma, se hacen eternos de pura vitalidad. Bloom dice: “la vitalidad es la medida del genio literario” (Genios, capítulo dedicado a J.L. Borges).

¡Socorro! ¿Los políticos inundarán las listas de música?

Tras el exitazo del video-clip que, indirectamente, protagoniza Barak Obama, quién sabe si las próximas elecciones a la presidencia se decidirán tras una demostración de baile moderno. Y como parece que en España las cosas funcionan más o menos igual que en los EEUU, pero con retraso, el candidato socialista a la presidencia española, José Luís Rodríguez Zapatero, no podía ser menos y también merecía protagonizar una pieza musical. Al igual que varios artistas norteamericanos, unidos en una canción para ayudar a Obama en la campaña, unos cuantos actores y actrices españoles han querido apoyar al líder socialista en el período preelectoral. Y es que el que podría ser, de nuevo, el futuro presidente tiene hasta gesto propio: una mueca particular realizada colocando el dedo índice en forma de gancho, como el del Capitán Garfio, acercándolo al ojo, a modo de mirilla, o algo así. No sé bien qué significa el nuevo signo, creo que ellos tampoco, pero ¡cuidado!, porque unido a un “Michael Jackson” del candidato a Eurovisión con el baile del chiki-chiki puede convertirse en el próximo baile del verano. ¿Es una nueva forma de acercar la política a la gente? ¿Es una manera de alejar la política de la política? ¿Es un intento de pervertir un poquito más el panorama musical?